Hay buen estrés y mal estrés. ¿La fecha límite cercana está a tu alcance?
Trabajar bajo presión, cuando sientes que tienes el control, es un buen estrés, especialmente si eres efectivo y disfrutas tu trabajo. Es bueno para su salud, especialmente cuando sus esfuerzos producen resultados, lo que reduce sus ansiedades. Sabes que puedes volar alto y ser un ángel.
El otro tipo de estrés es cuando le presentan cosas que tienen soluciones nebulosas, ambiguas o imposibles. Es posible que se le pida que ponga en peligro su propia carrera al participar en un comportamiento poco ético e incluso infringir la ley. Este es un estrés destructivo, ya que sabes que estás comprometido, pero que también podrías sufrir consecuencias negativas si no sigues el “programa”.