No son las burbujas, es el sodio. La sal es una parte importante de nuestras dietas, pero en dosis bastante pequeñas.
Pero las bebidas planas tenderán a saborear mucho más dulces, hasta el punto en que son enfermizas.
Un refresco es un regalo ocasional, como un cono de helado o un dulce de chocolate. Es bueno para ti porque te da placer, no por las consecuencias dietéticas.